sábado, 20 de julio de 2013

CRÓNICA DE LA ASCENSIÓN

Y FINALMENTE SE ALCANZÓ LA CUMBRE DEL ELBRUS

Después de meses de entrenamiento, llegó la partida hacia el techo de Europa. El grupo finalmente quedó formado por el gaditano José Carolos Igeno, el barcelonés de Sabadell Sergio Nicolás (Nico), la salmantina residente en Ondara María Isabel Vicente y los ilicitanos José Manuel Bonmatí y Jaime Antón, como coordinador del RETO EVEREST.


Los primeros días fueron de aclimatación, ascendiendo al pico Cheget de 3.465 m. y conociendo los pueblos caucasianos de Terskol y Cheget, en la región rusa de Kabardino Balkaria.

Los pronósticos de la meteo eran buenos y las sensaciones de los montañeros también, con lo cual se decidió atacar cumbre la madrugada del 16 de julio, a las 2:10 AM, según estaba programado. El grupo de montañeros, acompañado de un guía ruso y un asistente, fue el único que partiría desde los 3.720 m. de altura, cota en la que se encuentra el Campo Base de los Barrels. El resto de expediciones que intentaría la cumbre esa jornada comenzarían la ascensión desde las cotas 4.600, 4.800 o 5.000 m. según los dólares que hubieran pagado a las “snow-cats” (máquinas de cadenas que transportan a esquiadores y al 90% de los montañeros que tratan de alcanzar esta cumbre).
Sobre las 4 de la madrugada y una vez adelantados ya por varias snow-cats, el tiempo comenzó a cambiar y poco a poco una ligera ventisca y nubes fueron cubriendo la montaña.

Pasadas las Pastukhovas, a unos 4800 metros de altura, la pendiente comenzaba a aumentar y a hacerse más dura, al igual que la ventisca de nieve, que se volvía seria y fría, y parecía querer anunciarnos una auténtica tormenta más arriba. En ese momento fue cuando Isabel comenzó a padecer síntomas de hipotermia y en la siguiente parada se le hizo beber té caliente y se le arropó entre los demás para tratar de que entrara en calor. Este gesto se repetiría en más de una ocasión durante el camino a la cima.

Cerca  de los 5.000 m. José Carlos comenzaba a sentir síntomas de congelación en los dedos de los pies y en alguno de las manos, y tras hablar con Jaime y un asistente ruso, decide dar media vuelta y volver a Los Barrels acompañado por este último.

Los cuatro alpinistas restantes continuaron la ascensión en medio de una ventisca cada vez más fuerte y una montaña totalmente cerrada. Una vez alcanzado el famoso “saddle”, collado situado a 5.400 m., entre las dos cumbres del Elbrus, la ventisca rondaba ya los 80 km/h. y la sensación térmica bajaba hasta los -20ºC. Finalmente, en medio de unas situaciones extremas, con rachas de viento de 100 km/hora y con visibilidad nula, con una mezcla de alegría, agotamiento y preocupación por el descenso,  los  cuatro montañeros: José Manuel Bonmatí Alonso, Isabel Vicente López, Sergio Nicolás Fernández y Jaime Antón alcanzaban la cumbre del Elbrus a las 11:00 AM.



El descenso resultó toda una prueba de entereza, pundonor y buena organización de equipo, que unido a la experiencia y profesionalidad de los guías rusos condujo a los montañeros hasta la cota 4.900 m. desde la cual contactaron con una snow-cat para  retornar, junto con otros grupo de alpinistas hasta el campo base y poder celebrar el éxito de alcanzar el techo de Europa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario